Jardín moderno y agradable, con una gran fuente y senderos rocosos.

Mirador con una de las vistas más bellas de Portugal. Desde aquí se puede ver el río Duero discurriendo entre las verdes colinas, con la vecina España al otro lado.

Perteneciente al Antiguo Macizo de Trás-os-Montes, esta montaña se encuentra en el extremo noroeste del territorio nacional, entre el río Duero y el río Sabor, elevándose hasta unos 993 metros. El paisaje forestal tiene predominio de pinos y castaños, intercalados con algunos espacios de cultivo. Destacan los excelentes miradores: Pico de São Cristóvão y Alto da Castanheira.

Iglesia del siglo XVII de planta de cruz latina con tres naves, capilla mayor, sacristía y anexo. Destacan los retablos de la Inmaculada Concepción, San Ignacio de Loyola, Nuestra Señora del Rosario y San Buenaventura, junto al altar mayor.

Castro de la Edad del Hierro, situado sobre un acantilado sobre el río Duero, lugar de difícil acceso, elegido por contar con buenas defensas naturales. Las defensas se reforzaron con un campo de piedras engastadas, un foso, una torre y una línea de murallas. Aquí se puede encontrar fauna poco común, desde el águila perdicera hasta la cigüeña negra y el alimoche.

Este museo está formado por piezas arqueológicas encontradas en el municipio, resultado de excavaciones arqueológicas y restos superficiales, algunos de los cuales son raros, tanto a nivel nacional como peninsular.

Ubicado en el Parque da Vila, este moderno espacio alberga diversas actividades y talleres, como clases de bailes de salón, música, pintura, aeróbic, entre otros. También incluye un espacio expositivo y la Oficina Municipal de Turismo.

A poca distancia del pueblo de Penas Roias se encuentran los restos de este castillo de estructura cuadrangular. Del castillo sólo queda la torre del homenaje, restos de un cubo circular y algunos tramos de la muralla. Este castillo constituía la primera línea de defensa en el noreste de Trás-os-Montes, junto con los castillos de Algoso, Miranda do Douro, Outeiro, Vimioso y Mogadouro, con los que formaba un fuerte grupo defensivo.

Ruta corta a pie, apta para caminar o en coche, integrada en el Parque Internacional del Duero. Con una longitud de unos nueve kilómetros, se tardan cuatro horas a pie y una hora en coche. Comienza y termina en el Centro de Interpretación Rural, en el pueblo de Bruçó, siguiendo senderos entre olivares, entre los acantilados del río Duero. Al final del sendero se puede visitar la tradicional almazara de aceite de oliva, en el mismo pueblo.

Ruta corta, pensada para realizar a pie o en 4X4, con una longitud de unos once kilómetros. Son cinco horas a pie o una hora y media en 4X4. Comienza y finaliza en el Centro de Interpretación Rural del pueblo de Bruçó (donde se pueden adquirir productos elaborados con castaña), recorriendo terrenos ocupados por castaños, con énfasis en un castaño centenario.