Pueblo de montaña muy antiguo, poblado mucho antes de la Fundación de Portugal, probablemente en época árabe o romana. Está situado en el noreste del municipio, junto a las sierras de Cabreira y Baçô, que nacen en la Serra da Estrela. Destacan la iglesia principal, el monumento más notable de la parroquia, y la Capilla de Santo António, con su altar dorado.

Típico pueblo de montaña donde hay casas de granito y estrechas calles de piedra. Alrededor de ellos hay campos agrícolas, siendo uno de los medios de vida de estas personas. Este pueblo se encuentra en las laderas de la Sierra que permite unas vistas fantásticas de la ladera e incluso en la serra da Estrela en días de cielo despejado.

Recorrido de 13 kilómetros a través de los paisajes de Castro Laboreiro, en medio de la Serra da Peneda.

Un pueblo muy antiguo situado a los pies de la Serra da Estrela, cuenta con un tramo de calzada romana. Destaca su iglesia principal, conocida como la Catedral das Beiras. Es un gran templo con tallas doradas, un techo con 102 pinturas y ornamentos litúrgicos. Cerca de allí, merece la pena visitar el Curral dos Romanos, también conocido como el Dólmen da Sobreda (Bien de Interés Público), una curiosa almazara de la época medieval, en la localidad de Rio de Mel, y el Penedo da Moura, una cueva natural.

Se levanta en la serra da Nave, en Moimenta da Beira y desemboca en el Duero en Castelo de Paiva.

Mirador ofrece unas magníficas vistas sobre toda la ciudad y la serra da Lousã.

Mirador ofrece unas magníficas vistas sobre toda la ciudad y la serra da Lousã.

Percurso pedestre de grande rota que envolve o vale de Arouca, a serra da Freita, os vales do Paivó e do Paiva, o Museu das Trilobites Gigantes - Centro de Interpretação Geológica de Canelas e o santuário da Sr.ª da Mó.

Desde la parte superior del castillo de Estremoz puede observar varias aldeas entre el manto cortar la llanura alentejana. En los días claros la Serra da Estrela es vislumbrada en el norte. Más cerca, Marvão, Portalegre, Alter do Chão, Cabeço de Vide, Fronteira y Monforte son manchas blanquecinas en el paisaje hacia el norte. En el otro lado, las casas de Evora conforman el paisaje.